Los intereses comunes nos unen con personas que ni conocemos, nos hacen formar grupos sociales y comunicarnos por medio de varios canales físicos y tecnológicos, en este caso nos competen los formados en las redes sociales, comunidades digitales o foros.
Estas comunidades se forman naturalmente y sin ningún tipo de segmentación, sus participantes se unen de forma voluntaria por un fin común. De allí se construyen relaciones particulares entre los miembros y diferentes acciones según sea el caso.
Podemos pertenecer a varias a la vez, al equipo de fútbol favorito, al de padres de familia del colegio, al de la montada en bicicleta los fines de semana, al de cine y lectura, el de los compañeros del colegio, de la universidad, movimientos sociales que luchan por un fin, el de alimentación saludable, entre muchos otros.
Tipos de comunidades
Según Richard Millington, experto en la administración de comunidades, existen varios tipos:
Comunidad de acción
Los miembros de esta quieren aportar algo para cambiar situaciones específicas y lograr sus metas. Son activos, lo importante es mantenerlos informados y darles a conocer lo que pueden hacer para estar más involucrados.
Un ejemplo de esta son los movimientos sociales que se mueven en la ciudad en torno al cuidado del medio ambiente, estos grupos siempre están en una constante búsqueda de movilizar personas y realizar acciones concretas para concientizar a la ciudadanía de cómo puede aportar y que efectivamente lo haga.
Comunidad de circunstancia
A estas pertenecen personas que viven situaciones particulares comunes, ejemplo, la misma enfermedad física o psicológica. Generalmente los grupos de apoyo son comunidades de este tipo. Las discusiones y el compartir experiencias son necesarias para crear vínculos entre ellos. El esfuerzo de compartir información de ayuda es fundamental: enlaces, recomendaciones, libros, etc., además de una guía constante.
Comunidad de interés
La pasión por la música, una serie de TV, una caricatura, un escritor, el estudio de un tema en específico, une a los miembros de este tipo de comunidad acerca de discusiones, noticias y eventos sobre estos temas que les interesa y les gusta.
Comunidad de lugar
Las distingue el aspecto local, una ubicación común los une. Los eventos que allí suceden destacan, la creación de lazos de negocios, instituciones, etc.
Comunidad de práctica
Grupos de personas que practican una misma actividad, las más comunes son las de profesionales (diseñadores, médicos, ingenieros…) y hobbies (deportes, artes, moda…). Lo nuevo, las recomendaciones de cómo hacer mejor las cosas, es el enfoque. Compartir el conocimiento es crucial, al igual que las discusiones de temas de valor entre los participantes.
En todas debe existir siempre un núcleo activo, personas que las impulsen y las mantengan marchando, para que se mantengan vivas.
En las estrategias de marketing digital
Crear comunidades es sin duda, una tarea complicada, pues como lo mencionamos al inicio, se generan naturalmente y por intereses comunes. Las marcas por su parte hacen esfuerzos por formarlas, sin embargo un fanpage y una cuenta de Twitter no son necesariamente una comunidad. Los casos más exitosos de este tipo de comunidad son las formadas por los fans de una forma divertida y emocional, las que son construidas por ellos mismos de manera esporádica, tranquila, motivados por la pasión, necesidad, circunstancia alrededor de un tema.
Las comunidades son importantes redes de audiencia, su importancia no radica en la capacidad de integrarlos como grupos comerciales, sino en generar contenidos realmente interesantes para ellos, pues harán todo lo posible por compartir este de manera orgánica. Así, los contenidos que generemos deben ser lo suficientemente poderosos para captar la atención de estos públicos y lograr su propagación de forma natural.